Desde su tierra natal, Michoacán, envió un mensaje directo al Palacio de Miraflores, en Caracas, Venezuela, donde despacha el mandatario Hugo Chávez; no mencionó su nombre, pero se refirió al mandatario sudamericano que lo llamó “un gran ignorante”.

En Uruapan, donde se oficializó la apertura total del mercado de Estados Unidos al aguacate mexicano, Calderón reiteró que la vía para generación de empleos es la apertura comercial, por eso –dijo– si no estamos de acuerdo hay que discutirlo pero sin descalificaciones.

Y después, a través de una canción regional endureció su comentario: “Y por eso tengo, como michoacano, siempre nuestra querida canción de Paloma Mensajera, que dice aquí no conocemos a los tales valentones, pero si es necesario nos sobra corazón (Al instante, Tere Vale, 13:29, duración 2’, 02/02/07, reoc)