El nuevo embajador de México en España, Jorge Zermeño Infante, negó que su designación haya sido "un premio" por su actuación el 1 de diciembre en la Cámara de Diputados, cuando Felipe Calderón asumió la Presidencia de la República.

Entrevistado luego de que rindió protesta como embajador, afirmó que "no es un premio" dicho nombramiento, pues "tengo la experiencia y los conocimientos para ocupar el cargo, por lo cual no acepto ese tipo de comentarios".

El ex presidente de la Cámara de Diputados dijo que buscará estrechar y acrecentar las relaciones entre México y España, "país con el que tenemos una gran relación histórica, política, social y económica".

Zermeño Infante, precisó que el reto principal es "promover lo que somos, lo que tenemos", para que México tenga una representación digna, de un Estado democrático y plural. (Notimex, 13:13, crg, 272607)