El diputado local Jacobo Bonilla, del PAN, aseguró que el inminente incremento a las tarifas del transporte público concesionario se "cocina" desde hace ocho meses entre autoridades capitalinas y la cúpula de ese sector.

El también secretario de la Comisión de Transporte de la ALDF indicó en un comunicado que es mentira que el gobierno capitalino se haya visto presionado por el esquema de alza a la gasolina para la inminente autorización del incremento de tarifas de taxis y microbuses.

Por ello propuso que el ajuste a estas tarifas se aplique bajo el mecanismo de estudios técnicos de origen-destino seis meses antes de que termine su gestión el titular de la Secretaría de Transportes y Vialidad, Armando Quintero, para evitar que esta decisión se convierta en objeto de negociación política.

"El ajuste a las tarifas de transporte público en la ciudad deben determinarse por la oferta y demanda del servicio y no por criterios políticos y populistas que sólo mantienen en quiebra a este sistema y evitan una actualización gradual, justa y adecuada", dijo.

Sostuvo que el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, justifica su decisión de incrementar los precios en el servicio poniendo a los transportistas de "rodillas" ante el gobierno local para que se revisen y actualicen las tarifas.

Agregó que a partir de la aprobación de la Reforma Fiscal, Ebrard se ha dedicado a mal informar a la población "y, en una postura demagógica, intenta disfrazar sus contradicciones, mentiras e incluso su promesa empeñada de ajustar las tarifas para este año".

El legislador del Partido Acción Nacional (PAN) adelantó que trabaja en una propuesta legislativa que termine con el vacío legal existente en esta materia para evitar que las tarifas se modifiquen por intereses políticos. (Notimex, 15:27, crg, 011007)