Pablo Hiriart, colaborador: Si el PRD quería llegar sin tropiezos, ni raspones internos, a la elección de su nueva dirigencia nacional, le va a costar. A medida que crece la posibilidad de que Jesús Ortega sea el ganador de la contienda interna, los golpes a la unidad perredista suben de potencia.

Ayer se conoció una carta de AMLO en la que exhorta en términos muy duros a que los coordinadores perredistas en el Senado y San Lázaro se retracten de apoyar los cambios a la legislatura electoral en materia de coaliciones. Después se conoció la respuesta del CEN del PRD poniéndole un alto a López Obrador, lo que ha venido apoyando el PRD en el Congreso es que en lugar de coaliciones haya candidaturas comunes, esto es, que en la boleta no vengan juntos los logos de los partidos coaligados, que si llevan al mismo candidato en la boleta electoral, haya un cuadro para cada partido con el nombre de ese candidato, así se sabrá cuántos votos tiene cada partido.

La ciudadanía será la que diga cuánto pesa en porcentaje cada partido, en lugar de que ese porcentaje se acuerde entre dirigencias partidistas en los llamados "convenios de coalición"; con esto, el PRD se evita el chantaje de ir coaligado con partidos que le cobran, por anticipado, el seis o siete por ciento de la votación, cuando en realidad sólo tienen el dos o el uno por ciento de la votación y nada más.

Si las alianzas se hacen por razones meramente mercantiles, porque a un partido le conviene ir con otro, le va a significar asientos en la Cámara de Diputados y dinero público que les va a entregar el IFE, estamos ante una perversión de la democracia. Hiriart agregó, el caso es que la reforma, tal y como está planteada, le conviene al PRD y sí perjudica a partidos que han tenido una vida artificial ¿Por qué, entonces, López Obrador descalificó en términos tan duros este acuerdo PRI, PAN y PRD para modificar el sistema de coaliciones?

Hay quienes opinan que el "plan B" de López Obrador está puesto en el PT, hacia allá puede emigrar en caso necesario, respecto al tema de los consejeros electorales, Oscar Mario Beteta dijo que es AMLO quien apoya el ministro de la SCJN, Genaro Góngora Pimentel, quien, por cierto, tenía que haber renunciado desde su inscripción y no lo hizo, a lo que Hiriart dijo que en el fondo está el gran temor de AMLO o por la ira de que no va ganando su candidato a la presidencia nacional del PRD, Alejandro Encinas.

Lo de Genaro Góngora de risa, si pone un consejero el PRD, si pone uno el PAN y el PRI otro, volveremos a las épocas de la Comisión Federal Electoral de hace algún par de décadas en que había representantes de partidos y eso fue lo que se cambió con la creación del IFE en 92 y se perfeccionó en 94 y 96 para que sean representantes ciudadanos, ahora van a volver a ser representantes de partido y ponen a ese señor Genaro Góngora y lo quieren poner para presidente del IFE, es decir, me parece que no tiene ni pies ni cabeza y es un retroceso enorme para la democracia.

Oscar Mario Beteta, conductor: Pero, además, todos saben la estrecha relación entre Genaro Góngora y López Obrador, se hizo pública desde que el tabasqueño era jefe de Gobierno del Distrito Federal, todos sabían que si "Lopitos" hubiera ganado las elecciones, Genaro Góngora hubiera sido presidente de la SCJN y así se iba a adueñar "Lopitos", primero del Ejecutivo, después del Judicial poniendo a este señor como presidente y, después, comprando el Legislativo, un "Chávez reloaded".

Hiriart destacó que hay excelente cartas para el IFE, está Fromow y también está María Marván, quien en el IFAI actuó son sobriedad, lo hizo con transparencia y, además, qué importa que su hermano sea asesor de AMLO, eso no importa, ella es valiosa por sí misma y es una gran persona.

También está Benito Nacif y también Lorenzo Córdova, gente de primera y no tener que meter al "cartucho más quemado de todos los cartuchos", que es el ministro Genaro Góngora Pimentel.

Para concluir, Pablo Hiriart resaltó el diferendo en el PRD por la exigencia de López Obrador a los coordinadores parlamentarios para que no apoyen la reforma al COFIPE. La respuesta del CEN del PRD fue: déjenos pensar con cabeza propia, se lo dijeron respetuosamente.

En el fondo, lo que hay es que un sector del PRD, fundamentalmente los expriistas, están muy preocupados porque a la dirigencia nacional del PRD pueda llegar Jesús Ortega, para bien del PRD, porque Ortega representa algo bueno y aunque no estoy de acuerdo en muchas de sus propuestas, pero tiene una gran capacidad de razosinio y entiendo que Ortega representa a la izquierda genuina, que quieren empujar un proyecto de nación y no lo impulsa un apetito personal de poder, como los otros, no está movido por la venganza ni por la revancha.

Finalmente, Hiriart dijo que los lópezobradoristas, lo que quieren, es romper al PRD, lo quieren partir, van a buscar pretextos porque va a llegar a dirigir al PRD una persona que viene de la izquierda y sabe lo que es partirse el lomo por los ideales de la izquierda, que es impulsar una agenda social a fondo y un cambio del sistema para que favorezca a las mayorías. Duración:11’:17” a.l/m