Los legisladores del Congreso de la Unión le proponen al gobierno federal que concrete un acuerdo que incluya a empresarios y tiendas departamentales con el objeto de evitar una escalada de precios ante lo que llaman la inminente alza en gasolinas que viene aparejada con la cuesta de enero. Curiosamente estos mismos diputados y senadores aprobaron el aumento a la gasolina. En un principio dijeron que no afectarían a la economía y ahora se contradicen.

¿Viene o no viene la cuesta de enero? Ayer el titular de la secretaría de Agricultura Alberto Cárdenas Jiménez decía que no hay que preocuparnos de que hayan aumentos de precios en la tortilla.

Los legisladores piensan que el pacto es una solución a la alza de precios ya que tienen como antecedente 1978 cuando se hizo un pacto que permitió bajar las condiciones inflacionarias. Sin embargo las condiciones de aquel entonces son totalmente diferentes a las actuales. El problema de hoy es un problema de oferta que no puede ser frenado por un pacto por decreto. Se podrán aminorar algunos precios, pero es inevitable que éstos alcancen su nivel.

El Congreso debería pedir al gobierno ampliar drásticamente la apertura económica para que se atraigan insumos y productos más baratos del exterior. La economía mexicana todavía tiene muchas áreas protegidas.

La competitividad y productividad en México están por debajo de los niveles mundiales. Se dejaron pasar 15 años en cultura de competencia. Duración: 09’:32” a.l./m