Leticia Robles de la Rosa, reportera: Por quinta ocasión, el Senado de la República debió postergar la inauguración de su nueva sede en Insurgentes y Reforma, programada para el 21 de marzo, porque la empresa constructora incumplió nuevamente los plazos; los legisladores esperan la conclusión de la obra entre el 29 de marzo y el 2 de abril.

Además de que aún no están instalados completamente y, por lo tanto, probados los sistema de aire acondicionado y electrónicos, que son los centros neurálgicos de la operación de la nueva sede, el Senado descubrió que el edificio carece de instalaciones sanitarias suficientes, al grado de que hay áreas completas sin ellas.

Así, la realización de la Conferencia Mundial de Parlamentarios contra la Corrupción será totalmente en las instalaciones de Xicoténcatl y Donceles 14.

Será inaugurada el viernes por el Secretario de la Función Pública, Salvador Vega, en representación del presidente Felipe Calderón, cuya inasistencia se confirmó apenas el martes.

Los senadores integrantes de los órganos de gobierno, como la Mesa Directiva, encabezada por el priista Manlio Fabio Beltrones, la Junta de Coordinación Política, liderada por el panista José González Morfín, fueron informados de las complicaciones que frustran nuevamente los planes de mudanza; ésta, en teoría, debió arrancar el 1 de marzo para que a más tardar el 15 de marzo comenzara a operarse y el 21 de marzo se inaugurara.

La información recabada es que los senadores fueron informados que el salón de plenos puede operar con normalidad, por lo cual es posible realizar la inauguración el 21 de marzo, pues también están prácticamente listas las oficinas de los 128 legisladores.

Pero no están en funcionamiento otras áreas que son fundamentales para el trabajo de los senadores, como las instalaciones para que trabaje el personal de Servicios Parlamentarios, quienes son el respaldo de todo lo que se discute en el pleno.

Tampoco está en operación la sala de prensa, para que pueda conocerse el trabajo de los legisladores federales y, además, se carece de las pruebas del sistema de vigilancia.

La valoración de los integrantes de la Mesa Directiva y la Junta de Coordinación Política fue que si ya se esperaron tanto tiempo, vale la pena hacerlo unos días más para estar seguros de que la operación de la nueva sede será plena, y no por partes.

Los legisladores involucrados con este proceso precisaron a Excélsior que desde los primeros días de marzo el secretario general de Servicios Administrativos, Rodolfo Noble, está casi como capataz detrás de la constructora, para que acelere el trabajo.

Además, se ordenó al Secretario General de Servicios Parlamentarios, Arturo Garita, hacer lo mismo con los técnicos y responsables de que el salón de plenos esté listo para usarse, con los espacios necesarios para los trabajadores de respaldo a legisladores, estenógrafos, edecanes, servicio médico y especialistas que distribuyen documentos y asesoran en materia de procedimiento parlamentario.

Puras promesas

El 11 de diciembre de 2007 el Senado colocó la primera piedra de la construcción:

Se planeó que en agosto de 2010 la empresa GAMI debía entregarla completa; pero la construcción de los cimientos, que llevó 18 meses, retrasó los planes. Luego se prometió para el 15 de septiembre, para el Bicentenario; tampoco se entregó la obra.

La empresa prometió entregarla en noviembre, para el Centenario de la Revolución, el día 20, pero tampoco cumplió y los senadores sólo abanderaron el nuevo edificio.

Luego se ofreció la fecha del 31 de enero, pero tampoco se cumplió. Después el 1 de marzo... y ahora se dice que para fin de mes o hasta abril. agb/m