Durante el período de análisis, la evolución del Indicador Global de Actividad Económica en México permitió observar que si bien la recuperación está en marcha, ésta lo hace a un ritmo menor; además, los indicadores de empleo renovaron las preocupaciones en torno a la calidad de los puestos creados pues la subocupación parece ir en aumento. Por otra parte, entre los factores que podrían limitar el crecimiento económico del país, de acuerdo con la Encuesta sobre las Expectativas de los Especialistas en Economía del Sector Privado, destaca la inseguridad pública como la principal causa, seguida de la falta de cambios estructurales y de la incertidumbre sobre la situación financiera internacional.

De los indicadores macroeconómicos dados a conocer en la semana, para el caso de México destacan las ventas de marzo de la ANTAD, que presentaron un incremento de sólo 0.7 por ciento. A pesar de esto, las ventas en supermercados acumularon 23 meses con caídas, en términos reales.
Adicionalmente, el número de empresas registradas en el programa IMMEX registró una pequeña caída en el mes de enero, pero acumula una pérdida de 195 unidades desde su nivel máximo observado en junio de 2009. Asimismo, la balanza de productos manufacturados presentó un freno en su ritmo de expansión durante el mes de febrero, a pesar de que el sector automotriz exportó 24.7 por ciento más vehículos. Dicha tendencia al alza del sector automotriz se vio reflejada en una mayor producción nacional, que durante el mes de marzo aumentó su producción en 26.30 por ciento.

Los resultados de los indicadores del desempeño al primer trimestre del año dados a conocer hasta ahora permiten señalar que México se enfrenta a dos retos fundamentales: primero, revertir la desaceleración en su ritmo de crecimiento, medido por los cambios en la actividad industrial, cuyo crecimiento fue menor en 1.5 puntos porcentuales entre febrero y enero de este año; y, segundo, revertir la percepción del consumidor mediante el fortaleciendo la demanda interna, ya que el índice de confianza del consumidor revela una percepción pesimista de los consumidores en el corto plazo.

Los resultados de los indicadores dados a conocer la semana pasada, indican que la actividad económica en México continuara mejorando de manera moderada. La Encuesta Sobre las Expectativas del Sector Privado señala que en 2011 se pronostica que el país pueda crecer 4.25 por ciento, cifra menor al crecimiento de 2010, por lo que se podría esperar una desaceleración de la economía mexicana.